A pesar de que probablemente fue una de las ciudades más bellas de su época, Medina Azahara permaneció oculta y abandonada durante siglos. A los cien años de su construcción las guerras destrozaron la ciudad y poco a poco la tierra fue cubriéndola. Las piedras de muchos de sus maravillosos edificios fueron utilizados durante un tiempo en otras construcciones de la ciudad de Córdoba y el resto permaneció bajo tierra. Las excavaciones arqueológicas han permitido rescatar parte de la antigua ciudad, que puede ser visitada. Medina Azahara es, hoy en día, el regalo del califa para el que se acerca a conocerla.
2 comentarios:
Muy bien Iván, muchas gracias por escribirlo.
Un saludo, Karmen.
como mola interesante
alba marina
Publicar un comentario